Nuestras presas preferidas están
de regreso con esta tercera temporada que si bien es un poco lenta en realidad
logra avanzar mucho en la historia de los personajes secundarios que ya
comenzaban a estancarse bastante y darle buenos giros a otros que comenzaban a
no ser nada relevantes. OITNB se ha convertido en una de esas historias que
tienen mucho que explotar pero deben manejar las cosas de manera correcta o
podrían caer en un largo abismo y hasta el momento todo ha salido bien pues a
pesar de ocupar diferentes maneras de contar la trama, el cambio no ha sido tan
fuerte como en otras series y han logrado que nos intriguemos por la vida de
estas mujeres e inclusive nos emocionemos con pequeñas cosas que han ido
sucediendo.
Durante la primera temporada nos
entregaron a una protagonista y como ella se desenvolvía dentro de una prisión,
en la segunda tuvimos una historia más violenta donde veíamos un poco sobre lo
oscuro de esta prisión pero sobre todo comenzamos a tener un capitulo para
conocer la historia de cierta reas finalmente ha llegado la tercera temporada
que queda perfectamente en medio de las anteriores; ahora deciden contarnos la
historia de la protagonista y como es que el turbio ambiente de este lugar la
va cambiando mientras capitulo a capitulo conocemos mucho acerca de la vida de los
personajes secundarios que parecían estar ahí como puro relleno mientras en
algunas historias logran por fin salir del mismo lugar donde nos han mantenido
por dos temporadas para dar el gran cambio y volverse algo bastante
interesante. Actoralmente seguimos en esa misma línea de excelencia pues no
existe una mujer que no haga lo que tiene que hacer y lo haga de la manera
correcta por lo que solo nos queda aplaudirles su impresionante actuación.
Hablar explícitamente de lo que
ocurre dentro de la serie es algo inevitable pues con todo y nuevos personajes
que en verdad no aportan mucho a excepción de uno, Ruby Rose, que durante los
últimos episodios logra convertirse en algo relevante pero que sobre todo nos
deja mucho a la imaginación de lo que podría venir. Por otro lado existe una
historia en específico que inicia como algo sin gracia y poco a poco se va
volviendo la parte más fuerte de la serie pues Sophia (Laverne Cox) es de esos
personajes explotables al cien y aquí recibe el trato que merecía desde el
principio. Por otro lado la historia de nuestra protagonista Piper se vuelve
bastante oscura pintada con un tenue color de rosa cuando en realidad no es así
y finalmente existen muchos personajes que tenían ya tres años con nosotros que
parece que ya no estarán pues además de ser una temporada secundaria se
dedicaron a eliminar a muchos de ellos de la manera correcta. Solo nos queda
esperar a ver que es lo que harán dentro de un año puesto que el final deja
muchas expectativas de lo que podría venir.
9/10
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